martes, 24 de febrero de 2009

YES, WE JARL!

Tenía que compartir con vosotros lo mejor que he oído en mucho tiempo, Chiquito 4 President. Yes We Jarl!
En estos momentos en los que la reputación de políticos, economistas (vaya honra para el gremio), empresarios y aprovechados en general está por los suelos, pongamos un poco de humor.


Quien no recuerda esos chistes tan malos, esas frases, ¡Comoooor! ¡Fistro! ¡Pecador! incluso aquellos tazos. Ahora más que nunca Yes, We Jarl!

Estas cosas son las que no puedo compartir con un americano. Es humor sólo nuestro.

martes, 17 de febrero de 2009

¡Oh Canadá!

Puede pareceros que tengo muchos puentes, pero no es así, hay unas cinco fiestas nacionales, y depende de lo que decida tu empresa para que sea festivo o no. Este lunes fue President´s Day así que para celebrarlo por todo lo alto me fui de EE.UU, a Canadá. Unas seis horas de viaje en coche pasando por Seattle, en el Estado de Washington y llegando a Vancouver (Canadá). Nos fuimos una chica de Málaga, un sevillano y yo. Olé! Como no, inherente a mi estilo de viaje, nos quedamos en un hostel en el centro de Vancouver el cual estaba muy bien y con muy buen ambiente internacional.

Vancouver es una de las mayores ciudades de la costa Oeste de Norteamérica, rodeada de montañas y de mar, organizará los juegos olímpicos de invierno del próximo año. Tiene bastante marcha, y los bares están abiertos hasta más tarde que en la vecina USA así que aprovechamos a salir un poco más de la hora hasta la que nos dejan salir en la libre América. Canadá es más parecido a Europa de lo que es USA, aparte de volver a los Km y a los grados Celsius, se nota que los coches son más pequeños, las carreteras también y la gasolina es más cara.

En el albergue de Vancouver conocimos a un grupo de estudiantes universitarios de una ciudad llamada Walla Walla, Estado de Washington (yo que pensaba que Cristo perdió la chancleta en Portland, pues no, la perdió en Walla Walla) a los que nos unimos para salir por allí. Próxima visita Walla Walla en unas semanas, enviado especial de A ti que te Importland.

Vancouver es una ciudad bastante moderna, de rascacielos y rodeada de naturaleza, también tiene uno de los mayores Chinatown de Norteamérica con un mercado lleno de productos al aire libre (no apto para gente sensible a olores fuertes).

A la vuelta ayer lunes, después de esperar una hora y media en la frontera (mucho libre comercio con el NAFTA pero de libre circulación de personas nada de nada) paramos a comer en Seattle y de vuelta a casa. Hoy doble dosis de café americano. ¡Que viva el presidente!

Bienvenidos a Vancouver, zona libre de armas nucleares.




Cuenta atrás para los juegos olímpicos de invierno (estamos intentando hacer la bandera olímpica pero se nos fue la olla e hicimos un anillo de más)


Capilano Bridge



Chinatown


Space Needle (Seattle), Piru, esta va por ti, la torre de Anatomía de Grey.


martes, 10 de febrero de 2009

Como lo prometido es deuda, os pongo algunas fotos de la nueva casa, así os animáis a venir. De momento ya hay dos visitas programadas. La de tres amigos de Bilbao, con su correspondiente Roadtrip que nos vamos a hacer a Califormia y Las Vegas, y la de mis padres, que con menos inglés que los anteriores esperemos que lleguen sanos y salvos. Mamá, papá, no metáis la pata de jamón en la maleta que esta prohibido.

Downtown desde el balcón












Zona de invitados, digo zona porque no tiene puertas pero es grande, para la primera visita habrá sofá-cama, esperemos.

viernes, 6 de febrero de 2009

Casa nueva

Hace tiempo que A ti que te Importland no da noticias al otro lado del charco.
Llevo unas semanas bastante liado, entre otras cosas con el nuevo piso. Iluso de mí que decía, bueno, hago una lista, miro el catalogo del Ikea, voy, compro y a correr, pero no es tan fácil. Eso sí, ya me conozco el Ikea como la palma de mi mano, y algunos sitios de gangas.
Gracias a amigos que llevan aquí tiempo viviendo y se conocen los mejores lugares, ya tengo casi todo. Me falta la cama de invitados, pero hasta abril no me hace falta. Hasta me he comprado por 10 $ unas hamacas de piscina que quedan genial en mi balcón, como si estuviera tomando un mojito en el caribe pero en vez de tener en frente la playa, con vistas a los rascacielos.

Tengo hasta tele nueva, no es que la vea mucho, pero viene bien para aprender inglés, todo ello sin cable, con lo que veo los canales gratuitos entre los que hay un par de ellos de telepredicadores (uno de ellos en español mexicano) que son para echarse a llorar.


Os colgare unas fotos del apartamento esta semana, cuando termine de ponerlo todo más o menos.

El fin de semana pasado nos fuimos un grupo de quince personas al partido de los Blazers contra Utah, la mayoría españoles, a dar un poco ruido y hacernos notar, a ver si salíamos en la pantalla grande y Rudy y Sergio Rodriguez nos hacían un poco de caso. ¡Pues nada! Las entradas eran en lo alto del todo (las mas baratas claro) y a pesar de nuestra insistencia con pitos, banderas, bocinas, pompones y panderetas, nada de nada. Salió todo el mundo en la pantalla menos nosotros, hubo hasta una pareja el el que él le pido matrimonio a ella mientras les rodeaba un corazón (no comments), afortunadamente dijo que sí, porque si no, vaya vergüenza.

Puede que nos saliéramos en la pantalla, pero a la salida del partido conseguimos colarnos en la zona de salida de los jugadores y que Sergio y Rudy pararan y hablaran un rato con nosotros. Estaban flipando diciendo, pero ¿de dónde ha salido toda esta marabunta de españoles? Supuestamente vamos a quedar un día con ellos para ir a comer a finales de febrero. Ya os contaré al final que pasa.

Y el domingo pasado, la famosa Super Bowl que nadie se pierde, un amigo americano nos invitó a unos cuantos a su casa, a merendar y a beber cerveza, jugaban Pittsburg-Arizona, consiste en gritar en las jugadas, comer, beber y ver los anuncios de televisión que son los más caros del año y sólo se hacen para este evento. Estuvo muy bien, aunque demasiado Yanki, ¡ah!, gano Pittsburg por si a alguno os interesa. El partido estuvo bastante emocionante, y la cerveza y la comida también, que es a lo que íbamos.